La regla 80/20

Vilfredo Pareto, polímata italiano, notó que aproximadamente el 80 % de las tierras de Italia pertenecían al 20 % de la población.

En 1941, Joseph M. Juran, se encontró estas ideas, y las desarrolló en el contexto de economía y control de calidad.

Y así nació lo que hoy conocemos como el Principio de Pareto, o la regla del 80/20, que nos dice que el 80 % de las consecuencias se originan por el 20 % de las causas.

Qué idea tan interesante, ¿no? Que algo tan grande pueda tener origen en algo tan pequeño.

He descubierto que este principio también aplica para mi bienestar, salud mental, y estabilidad emocional.

Si reflexiono, el 80 % de los efectos positivos que he visto en mi vida durante los últimos años, han venido del 20 % de las decisiones que he tomado. Dejar de fumar y de tomar alcohol, mudarme de Colima, comenzar a escribir todas las mañanas.

Curiosamente, el 80 % de mis frustraciones o disgustos también han venido del 20 % de mis decisiones — mayormente, decisiones de si permito que algo me afecte o no.

“No controlamos los resultados, únicamente controlamos nuestra actitud hacia ellos”, decían los estoicos.

Y es algo que he aprendido: las circunstancias únicamente me pueden afectar si lo permito.

Hay que mantener las cosas en perspectiva.

Porque, ¿qué es lo peor que puede pasar?

Premeditatio malorum.